Los Rockies de Colorado han tomado las medidas necesarias para asegurar un futuro competitivo. Estas medidas no son para nada económicas, pero tienen todo el sentido del mundo.
Luego de firmar al shortstop Troy Tulowitzki a una extensión de contrato por siete años y $134 millones en noviembre, los Rockies anunciaron el martes el nuevo pacto del venezolano Carlos González por siete años y $80.5 millones de dólares.
Hasta ahora los Rockies se han comprometido con $214.5 millones en dos jugadores, pero el valor de estos dos peloteros no está en duda. Además, Tulowitzki tiene 26 años de edad y González tiene apenas 25. Estos no son casos en los que un club se ve forzado por el mercado a hacer este tipo de contrataciones que simplemente son muy largas, extendiéndose más allá de las cimas proyectadas de los jugadores contratados y el sentido común. Estos son obviamente contratos largos, pero a la vez sensatos pues no cubren más allá de lo que se supone serán los mejores años para este par de talentosos jugadores.
El contrato de González llega con un poco más de sorpresa. El agente de González es Scott Boras. El camino típico en la carrera de un pelotero estelar con esa representación quien no juega para un equipo grande es esperar a convertirse en agente libre. Pero González es elegible para la agencia libre hasta el 2014. Con este pacto, el venezolano obtiene un sueldo millonario mucho antes de convertirse en agente libre, pero por otro lado, los Rockies obtienen la seguridad de tenerlo bajo contrato por siete años. Y el club lo obtiene a un precio que es, en una base anual, razonable tomando en cuenta los estándares del mercado actual.
El valor de Tulowitzki para este club ya ha sido demostrado. Y los Rockies ya han demostrado, a través del contrato por $134 millones, que aprecian considerablemente su valor. Pero González tuvo una temporada 2010 más que brillante.
González fue adquirido de Oakland en el canje por Matt Holliday en noviembre de 2008. Y entre más González se desarrolla como pelotero, el pacto adquiere aún más importancia y valor para los Rockies. El manager Jim Tracy demostró la paciencia necesaria con González en 2009, y esa paciencia fue recompensada con González jugando un papel clave en el gran resurgimiento de los Rockies.
En 2010, González alcanzó el estrellato. El venezolano se llevó el título de bateo de la Liga Nacional con un promedio de .336, ganó el Guante de Oro, tuvo 34 jonrones y 117 carreras producidas, ocupó el segundo lugar en la Liga Nacional con un porcentaje de slugging de .598 y el tercer lugar en porcentaje de embasarse más slugging con .974. También finalizó en tercer lugar en las votaciones para el Jugador Más valioso de la L.N., detrás de Joey Votto y el dominicano Albert Pujols. Esto fue entendible, considerando el peso de Pujols y los Rojos de Votto ganando su división, pero fácilmente se puede argumentar que González tuvo una temporada brillante en la Liga Nacional en 2010. Sus compañeros en los demás equipos votaron por él como el Jugador Más Destacado en Grandes Ligas.
Indisputablemente, González se ha convertido en un jugador de impacto. En combinación con Tulowitzki, el venezolano le ofrece a los Rockies una base de talento y muy posiblemente el éxito a largo plazo.
Pero estas dos contrataciones no traen el éxito por sí solas. En el Oeste de la Liga Nacional, los Rockies tendrán que competir con los Gigantes, cuyo pitcheo fue lo suficientemente sólido como para llevarlos a ganar la Serie Mundial. Los Padres también cuentan con pitcheo de calidad y en cantidad, y aun con la partida del mexicano Adrián González, esto los convierte en un difícil oponente. Los Dodgers cuentan con una considerable cantidad de talento, así como también recursos económicos. Y una vez que se resuelva el divorcio entre sus propietarios, los Dodgers seguramente volverán a ser contendientes.
Pero los Rockies han demostrado su propia habilidad para construir una organización ganadora. Han hecho lo que franquicias, con la excepción de los Yankees, deben hacer - construir una base organizacional y un sistema de desarrollo de jugadores sólido, dándole la oportunidad a prospectos de su propia organización y realizando contrataciones astutas cada vez que sea posible. En esas dos categorías, respectivamente, encontramos a Tulowitzki y González.
Los Rockies de Colorado se han dado la oportunidad de tener éxito a largo plazo al identificar a dos de los mejores jugadores jóvenes en el juego y luego gastando los recursos necesarios para mantener sus servicios.
Estas no sólo son buenas noticias para Tulowitzki y González, pero también son buenas noticias para toda la organización y los aficionados de Colorado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario